Impacientando a la muerte

Ponerse
a escribir
es como decirle
a la muerte,
espera un momento querida,
que ahora
estoy ocupado

cuando viene a buscarte.
Ahora mismo
estoy frente al papel
diciéndome a mí mismo
venga tío,
saca algo bueno
de tu interior,
demuéstrales que eres
un puto genio,
que sepan quien manda
,
pero lo único
que sale
hoy de mí
es lo que
evacuan mis intestinos,
y tampoco me estoy llevando
muy bien
con ellos
últimamente;
así
que mejor
pruebo suerte mañana
y esta noche
dejo
la puerta abierta
para no hacer
esperar
a la muerte.